9 jun 2010

Así, como quien dice derecha la flecha.

Ultimamente he tenido muy presente esa sensación tan abrumadora de que ya no hay nada o casi nada original. Esa frase que sentencia que no hay nada nuevo bajo el sol, bien cierta, sólo deja lugar a formas de decir, hacer o concebir distintas. Pero en realidad ¿no hay nada nuevo? Que la ciencia lo decida. Para mí, sé que no soy original, ni haré cosas inéditas. Es más, a veces creo que todo lo que pienso ya fue pensado.

Pero de todas formas tengo ganas de compartirlo. Porque sé que soy producto de millones de influencias. Si hablo de una forma es porque he aprehendido formas de otras personas. Así mi gusto visual en diseño, cine, estética humana, estética artística, colores y en general, es resultado de todo lo que he visto ajeno.

Si tengo una idea es porque he juntado en mi cabeza ideas ajenas a mí, que lei, escuché, vi, presencie o lo que sea. Trato de no repetir, de no ser raptor de méritos ajenos y de hecho nunca lo he hecho así. Y hoy he despertado como los últimos varios días, con ganas de escribir.

Entonces pensando en ello ¿qué podría escribir y para quién? ¿Por qué?
Todas las pregutnas me recuerdan a un personaje de un libro que ya he mencionado. José GArcía. Creado por Josefina Vicens para su libro El Libro Vacío. Un individuo que no puede dejar de escribir. Y lo voy a citar:

"Confiesa que tu necesidad de hacerlo es mas fuerte que tú, olvida tu desorbitada ambición de escribir un libro que a todos interese; acepta tu verdadera medida y comprende que si no has escrito otra cosa es porque sólo puedes referirte a lo que es tuyo: los recuerdos que estremecen, contentan o lastiman tu corazón, los opacos sucesos de tu vida diaria y tu relación con unos cuantos seres humanos que coincidieron en tu pequeña órbita. Eso es lo único que te pertenece, lo único que conoces, lo único que comprendes, y por tanto, lo único que puedes expresar. tal vez logres algún día inventar un suceso. Lo que no lograrás inventar es la emoción que te habría producido ese acontecimiento si lo hubieras vivio."

Yo como todo ser normal y ordinario, alguna vez tuve una ambición que más bien era una especie de ilusión de ganarme la inmortalidad, de aquella que habla Milan Kundera. PAra la cual a veces aplicaba de manera cándida el método de la suma y la resta.

Sí, quería ser recordado, tal vez no como José García quería escuchar a la gente decir -¿Ya sabes del nuevo libro de José García?- Pero sí que alguien a quien nunca en mi vida conoceré, supiera de mí. Y que me recordara por algo que hice.

Hoy sé que no soy ni seré ningún genio. Pero hoy también sé que me quiero expresar de otra forma a la que siempre lo he heecho. Y por eso estoy aqui solo, escribiendo.
Sólo escribiré por el mero acto de expresar lo que me pertenece y lo que se me ocurre. Escribiré para solitarios siendo yo uno. Conversaré con la posteridad.

Y sobre todo viajaré mucho al pasado, que es de donde vengo. Que es lo que me ha hecho hoy estar aqui. Porque estar a la vanguardia del mundo, en el internet, en donde el año dura menos de 90 días, creo que nunca lo podría hacer.

Por lo tanto aqui está mi basurero de textos. Donde practicaré lo más que pueda para algún día no ser tan mal redactor. Algún día poder ser de menos elocuente.
Mientras tanto aqui estoy construyendo ese yo tan escondido, tan abrumado, tan limitado y casi invisible, para ver si lo encuentro.

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